100-150 g de cacao van bien para 1 litro de líquido, y se puede enriquecer con algo de chocolate o algún espesante. Si solo usamos en tableta, una buena medida son 120-150 g por 500 ml, ya que cundirá más que preparándolo solo con cacao en polvo
Siempre hay que calentar hasta hervir el agua o leche antes de mezclar con el chocolate bien picado o rallado, removiendo con suavidad hasta fundir. Después se devuelve al fuego, cociendo lentamente procurando que no se pegue al fondo, hasta obtener una consistencia deseada. Si se deja reposar varias horas antes de volver a calentarlo, ganará en sabor y textura, y es toda una delicia con unas escamas de sal por encima
Partiremos de 1 litro de líquido para unas cuatro raciones generosas o seis más comedidas. Se puede elaborar solo con agua si nos gusta a la española tradicional, o combinándola con leche a nuestro gusto, que suavizará la bebida y ayuda a dar cierta consistencia
El espesor no lo determina tanto el líquido como la cantidad de chocolate que vayamos a agregar
Podemos emplear solo cacao en polvo, más fácil aún, chocolate en tableta, que proporciona un acabado mucho más espeso, más sabroso y nos evita el riesgo de los grumos
Si nos parece demasiado intenso lo más fácil es combinar cacao puro con chocolate picado, añadiendo, opcionalmente, una cucharadita de maizena u otro espesante, y azúcar o edulcorantes al gusto
aromatizar el líquido previamente haciendo una infusión con vainilla natural, canela en rama, licor o especias